Hechos el uno para el otro:
Fuerteventura presenta las características ideales para poner en funcionamiento un molino de viento: grandes espacios abiertos, orografía plana y fuertes vientos, especialmente en el centro-norte de la isla.
En el s. XVIII se introdujo el modelo de molino de viento de Castilla en Fuerteventura y, a partir de ese momento, comenzaron a construirse estas estructuras por toda la isla, llegando a contabilizarse 1000 molinos.
El trabajo de molinero era muy importante, ya que debían controlar la velocidad y el ritmo del giro de las aspas para conseguir el punto adecuado de la molienda de los granos. Su sabiduría se transmitía de generación en generación.
¿Mil molinos en la isla?
Los molinos de viento supusieron un elemento clave en el paisaje de Fuerteventura y la vida de los majoreros, destinándose tanto a la extracción de agua como a la molienda del grano, convirtiendo a Fuerteventura “el granero de Canarias”.
La molienda se dedicaba principalmente al gofio, pilar de la cultura canaria, que fue el nutriente fundamental tanto en épocas de abundancia como de penuria.
Los granos pueden ser de muchos tipos distintos (cebada, millo, trigo o centeno) y siempre se muele previamente tostado, lo que lo hace diferente del resto de harinas.


El Molino de Antigua
Este molino mantiene su puerta abierta, dispuesto a recibir a todo aquel que quiera conocer bien de cerca cómo es un molino de viento por dentro. A pesar de los años y todo lo que ha trabajado, se encuentra en perfecto estado. Después de subir por sus escaleras, podrás contemplar que, en su interior, conserva la maquinaria original: las ruedas dentadas, las piedras molineras, la tolva o el eje de las aspas. En fechas señaladas se pone en marcha, así que estate atento a nuestras publicaciones ¡y al viento!
Molinos, molinas y tahonas:
Si sigues interesado en los molinos de Fuerteventura, te invitamos a visitar el Centro de Interpretación los Molinos, a pocos kilómetros al sur de Antigua, en Tiscamanita. Ubicado en una auténtica casa majorera, este centro cuenta con una colección de distintos sistemas de molienda que el visitante puede accionar, para conocer la importancia de este tipo de utensilios en la vida de los majoreros. En su exterior se encuentra otro molino de viento que también sirvió para moler gofio, alimento canario por excelencia que, además, podrás degustar recién amasado en zurrón para nuestros visitantes.